DARKNESS IS HIS ALLY
La defensa de una chica de unos aldeanos con ganas de pelea, pondra a Ichi en conocimiento de un grupo de yakuzas con no muy buenas ideas que han comprado a la niña… Ichi se encontrará con ellos y buscará la justicia…
Con Darkness is his ally, entrega número 26 y última del Zatoichi de Katsu, llegamos a su momento crepuscular, final. Estamos en 1989 y hemos tenido que esperar muchos muchos años para asistir a este instante, en el que Katsu no sólo cierra la serie sino de alguna manera el cine japonés de los años setenta, el cine de Zatoichi, de Lone Wolf, de Lady Snowblood, de Hanzo, en el que él tuvo un papel principal, y que marcó el cine y las salas de esa época.
Shintaro Katsu tiene 59 años y vive retirado del cine. En su regreso, no deja nada al azar: dirige, protagoniza, produce y escribe Darkness is his ally, y el resultado es una obra inaudita, triste o oscura como pocas, violenta y brutal, tierna y dulce…
Zatoichi ha envejecido, como el actor… Como nunca, camina a la deriva, vaga, sin un objetivo preciso… sus acciones son un compendio de otros veinticinco viajes… asistimos a alguno de sus mejores momentos… el juego, las emboscadas, los baños,… a través de una historia otras veces vista, muchas veces vista, pero que por ese mismo motivo nos permite dejarnos llevar, seguir a ese masajista ciego en su último viaje sin mayores distracciones… tenemos el joven yakuza ambicioso que toma el poder, el gobernador corrupto, el grupo rival, el ronin,… los grandes éxitos de este cine… pero convertidos en una mera sombra para que Zatoichi ejecute su danza macabra de destrucción (literalmente). El pesimismo (algo por otro lado habitual en la serie) lo invade todo… hasta ese final, brutal, por el que sabemos que nada cambiará, que todo seguirá igual, la deriva, el mal, la opresión, la vida...
DARKNESS IS HIS ALLY |
Hacer Comentario