La reputación de la Nikkatsu reposa sobre un cierto número de factores: el empleo de grandes autores (Kenji Mizoguchi en sus comienzos, Yuzo Kawashima, Shohei Imamura), sobre una apertura a la modernidad a finales de los años cincuenta, sobre una cierta manera de reinventar los films de gangsters (Koreyoshi Kurahra, Seijun Suzuki), sobre la invención, finalmente, del Roman Porno, categoría autónoma nacida al principio de los años setenta para evitar la quiebra del estudio. Las películas de monstruos (kaiju eiga) por el contrario no se asociaron jamás con la Nikkatsu. Es la Toho, tras el éxito de Godzilla en 1954 y Rodan en 1956, la que se hizo especialista en el género, produciendo intensivamente, durante más de dos décadas, obras que ponían en escena a gigantescas criaturas destruyendo Tokio y algunas grandes ciudades. El primitivismo de los efectos especiales (un figurante vestido con un pesado traje de caucho rodeado de maquetas) no impedía una cierta inventiva poética.
Otros estudios intentaron competir con la Toho en su propio terreno, como la Shochiku, que inventó a Itoka, el monstruo de las galaxias, la Toei y sus Monstruos del apocalipsis, la Daiei, que creó la tortuga a reacción Gamera y, claro está, la Nikkatsu, con ese efímero Daykioju Gappa, dirigido en 1967 por Haruyasu Noguchi, cineasta de la casa que firmará seis películas entre 1965 y 1967. Un grupo de científicos descubre un huevo gigantesco del que nace un monstruito que sus padres quieren recuperar. La particularidad de “Gappa”, más allá del sentido familiar, es la de poder desplazarse tanto por la tierra, como por el aire o bajo el mar. Entre los actores contamos con Tatsuya Fuji, que fue el protagonista, ocho años más tarde, de El imperio de los sentidos, de Nagisa Oshima. El fracaso comercial disuadirá a la Nikkatsu de continuar en el género. Daykioju Gappa se estrenó en Francia en 1970, tres años más tarde de su producción, con el fantasioso título de Gappa, el hijo de Godzilla.
Como complemento de la sesión doble, en forma de contrapunto dialéctico, proponemos una producción representativa de la Toho rodada en 1974 por los 20 años de la creación del personaje, Godzilla vs MechaGodzilla, de Jun Fukuda. La película, tras el fracaso comercial de Godzilla vs Megalon, logra relanzar una figura agotada por el infantilismo y lo cómico. Desembarazado de todo tipo de florituras inútiles que congestionaban las producciones precedentes, el guión hace que se enfrente el célebre lagarto gigante con su doble mecánico, enviado por los malvados extraterrestres. Godzilla vs MechaGodzilla fue dirigido por Jun Fukuda, autor de varias entregas de la serie.
Jean-François Rauger (Cinémathèque française)
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